Pablo Oliete

Desarrollando el ecosistema Industria 4.0 es España


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Este blog refleja mi opinión personal y espero que sea también un vehículo de conexión con otras personas que, como yo, se sigan sorprendiendo del espectacular momento tecnológico que vivimos en España.

Pablo Oliete

Desarrollando el ecosistema Industria 4.0 es España


junio 16, 2017 Sin categoría no responses

Me gusta que me hagas esta pregunta ¿cómo elegir un máster en Industria 4.0?

Me gusta que me hagas esta pregunta ¿cómo elegir un máster en Industria 4.0?

Últimamente mucha gente me pregunta sobre cómo elegir un máster en Industria 4.0. Y a mí me encanta que me lo pregunten. Primero porque hace dos años casi nadie conocía el término industria 4.0 y segundo porque dirijo uno de los primeros masters de estas características que se han puesto en marcha en España. Además en el curso 2017-2018 dirigiré dos, uno en Valencia con Peaks Business School (2ª edición) y otro en Valladolid con la Cámara de Comercio.

Ser pionero en algo es un trabajo arduo, y muchas veces desagradecido, pero lo que al final prevalece es el aprendizaje conseguido en el camino. Poner en marcha un programa máster sobre una “mega-multi-disciplina” como es la industria 4.0 ha sido un gran reto. No hay un camino previo, ni referente, ni espejo retrovisor donde mirar. Pero al final, con mucho trabajo y excelentes socios y colaboradores se llega a tocar el éxito.

Por tanto, creedme si os digo que he aprendido mucho en mi ruta como director de masters en Industria 4.0. Ahora quiero compartir ese conocimiento con vosotros y espero que este post sea de utilidad para aquellos que estéis pensando en formaros en tecnologías habilitadoras de la Industria 4.0, los nuevos modelos de negocio o cómo afrontar el emprendimiento dentro de este nuevo mundo dominado por la disrupción tecnológica.

Como argumentación general, un máster en Industria 4.0 debe capacitar al alumno, independientemente de su puesto de responsabilidad, en el diseño de productos conectados y en la fabricación avanzada de productos. Lo importante es que el alumno sea capaz de dominar tres ámbitos básicos de conocimiento: las tecnologías habilitadoras, las operaciones en la fábrica conectada y los nuevos modelos de negocio.

Desde mi punto de vista, los principales criterios a la hora de elegir un máster en Industria 4.0 son:

1.     Experiencia del programa y opinión de antiguos alumnos

Al final los alumnos son los verdaderos jueces de un programa. Actualmente las redes sociales son enormes altavoces que permiten conocer las opiniones de los alumnos de una forma absolutamente transparente, para bien o para mal.

En este sentido, lo que nosotros hicimos desde el principio con Peaks Business School fue involucrar a los alumnos en Twitter mediante la etiqueta #i40VAL. A lo largo de estos siete meses de programa, los participantes han ido vertiendo sus comentarios, y también sus aportaciones al programa. Si queréis conocer cómo nos valoran solo tenéis que entrar en ese hashtag, os adelanto que estamos muy satisfechos 😀.

2.     Perfil de los alumnos ya matriculados

Esta variable es una de las claves fundamentales del éxito del programa y tiene mucho que ver con el trabajo de búsqueda y selección de alumnos que se realice previamente. Deben ser personas que desempeñen su labor en el ámbito del desarrollo tecnológico, la fabricación o el diseño de servicios. Estas características propician una gran riqueza de conocimientos compartidos, tanto en la relación profesor-alumno como en la que se establece entre los propios alumnos. Si de algo podemos presumir en el primer programa organizado con Peaks es del gran nivel que hemos tenido. La foto es de algunos de los participantes en la 1ª edición con Peaks BS.

3.     Claustro de profesores

Los profesores… ¡Cuánto cuesta encontrar a los profesionales adecuados, y qué gran satisfacción tener la certeza de haber acertado!

Si yo tuviera que elegir un máster en industria 4.0, rechazaría cualquier programa en el que el claustro de profesores esté conformado por empleados de las empresas patrocinadoras. En ese claustro no habrá mucha motivación, ni entusiasmo, quizás tampoco conocimientos precisos y avanzados. Cuando un empleado imparte clase, más bien parece que está cumpliendo con una tarea encomendada por su organización, o haciendo una venta de productos. Este modelo no funciona. Pero ojo, no nos equivoquemos, el conocimiento está en los ambientes corporativos y por supuesto un programa máster debe contar con profesionales expertos que hablen de sus experiencias corporativas.

Si uno quiere contar con los mejores profesionales, normalmente estos no residen en una única ciudad o comunidad autónoma. Incluso hay que valorar que el programa cuente con profesionales de otros países.

Por otra parte, es muy importante la motivación de los profesores. Mi objetivo personal, tras cada módulo, es que el profesor me diga: “Pablo, qué bien lo he pasado”.

4.    Relación de la institución con las tecnologías habilitadoras

Actualmente, es difícil que una universidad o escuela de negocios tenga mucha experiencia previa en el conglomerado de saberes que aglutina la Industria 4.0. básicamente porque, como comenté al inicio, es una nueva gran disciplina. Lo normal es que acrediten experiencia en alguna/s de las tecnologías habilitadoras.

Ojo con los programas excesivamente polarizados en alguno de los tres ámbitos de conocimiento que propongo (tecnologías habilitadoras, las operaciones en la fábrica conectada y los nuevos modelos de negocio). El alumno no debe pasarse el día con Ingenieros Industriales o de Telecomunicaciones. En la diversidad está el justo equilibrio.

5.    Director del Programa

El director de un programa máster cimentado sobre los avances tecnológicos debe estar en continua búsqueda de talento para incorporarlos al programa. El papel del director académico no acaba en los contenidos, la selección de profesores o la gestión. Tiene que propiciar un continuo diálogo entre profesores y alumnos. Prolongar una relación entre ellos que dure todo el programa, o incluso después de la finalización.

Y para terminar, una última recomendación: si puedes, no renuncies a hacer un programa presencial. Las relaciones físicas generan grandes vínculos emocionales y también profesionales. Además, te proporcionará una más que interesante agenda de contactos que te resultará de gran ayuda a la hora de crecer laboralmente o lanzar tu proyecto de Industria 4.0.

Si aún tienes dudas estoy a tu disposición para seguir dialogando sobre el tema.

Pero si lo tienes claro, te invito a que eches un vistazo a los dos programas que voy a dirigir el próximo año: